Finales sin serlo

Hola. 

Ayer hice el que, muy probablemente, fue el último exámen de la carrera. Y aunque todavia queda un corto pero intenso camino porque me queda el TFG, toca hacer análisis.

Ya digo que eso que dicen de que la universidad es la mejor etapa de la vida... No. Disfruté más el bachillerato, Quizá por la gente que me rodeó. Hicimos un grupito tan guay que a día de hoy seguimos manteniendo una bonita amistad. Y una grupo-dependencia que no es ni medio normal. Cómo jode cuando alguno se va... 

Pero no vine a hablar de eso. 

Lo más que me han dicho en estos cuatro años de carrera cuando digo que estudio mates es "que hay que tener cabeza para estudiar una carrera así" o que "mira que hay que estar loco". En la segunda estoy bastante más de acuerdo. Me parece una locura muy guay. Y de la que me siento muy orgulloso. Me encanta lo que hago y lo que estudio.

No puedo estar de acuerdo con la primera. Sí que es verdad, y no lo voy a negar, que siempre he pensado que soy un tipo inteligente.  No sé si mucho o poco. Lo suficiente para aguantar el tirón, digamos. He tocado techo bastantes veces ya. Y por esa precisa razón es claro que la inteligencia ayuda, pero en absoluto es determinante. Estudiar matemáticas es echarle horas. Muchas horas. Cada vez más. Y echárselas, a poder ser, con gusto. Al menos la mayoría. O por lo menos la mitad. Pero echárselas al fin y al cabo. Yo soy más de los de la mitad. No voy a negarlo. He llorado figuradamente centenas de veces, me he planteado otras centenas dejar la carrera, y otras centenas las he pasado amargado en la biblioteca. Pero bueno. Hasta aquí he llegado.

Si tuviera que pararme a contar mi experiencia delante de 200 personas, diría que el ambiente que dejan los mayores cuando llegamos nosotros es una mierda. Cómo ha costado que seamos buenos compañeros y no nos importe dejar apuntes de una materia o exámenes que nos hayan pasado (obviamente, también hay autocrítica en estas palabras). Diría incluso que no lo acabamos de conseguir. Siento envidia de la mala por otras carreras que tienen eso. Creo que no se dan cuenta de lo que tienen. Tengo una lista donde voy apuntando la gente a la que le dejo mis apuntes, y los voy tachando conforme me los van devolviendo. Me gusta que sea grande. Siento que he dejado mi granito de arena por la facultad.

De los compis de clase... me llevo un pequeño grupito de amigos - no más de cinco-, algún@ que otr@ coleguita, y poco más. Supongo que también ha tenido que ver con cómo soy. No he sido capaz de llegar a ese punto de confianza. Cuando sale natural ser uno mismo, vamos. Pero bueno, ni les culpo ni me culpo. Eso sí, cosas que contar tengo a patadas... Y eso me hace muy feliz también. Hemos logrado hasta juntarnos para jugar partidos de fútbol contra profesores. Cosa que me parecía jodidamente inimaginable al principio de la carrera. ¡Que llevaban más de 15 años sin hacer algo así, nos dijeron! Pero cómo va a a ser eso... Sin duda, de las experiencias de la carrera :)

Otra cosa de la que hablaría es de los profes. En fin. Ninguno es imposible, como muchos piensan. Eso está claro. Alguno parece que no tiene ni corazón, pero por algún lado se les entra siempre. Malas experiencias me llevo, obviamente. Algunas por discusiones, otras por ellos. De todo un poco.  Sí que me decepciona un poco el hecho de que hay más de uno que parece que está ahí por pura obligación. Y eso da bastante pena, la verdad. También los hay que les gusta lo que hacen, supongo, pero se hacen notar menos. Sabe mal que se recuerde más a los que nos putearon. Por mi parte, entré en esta carrera por un profesor al que le encantaba lo que hacía y encima lo transmitía increíblemente bien. Y salgo de ella feliz de haber podido disfrutar en tres materias de otro. Admirable como profesional y como profesor. Y en lo poco que he podido conocerle como persona, también. De hecho, la única MH que saqué en toda la carrera fue con él. Y eso me hace muy feliz también. No sé muy bien si le he dejado una buena impresión, la verdad, pero he hecho lo posible. Y con eso me quedo.

Al TFG le dedicaré otro post cuando lo entregue. Lo merece.

Y bueno. Supongo que eso es todo. 

Esto no se acaba aquí porque todavía me queda mucho por hacer, muchas cosas que estudiar  y que mejorar de mí como persona y como estudiante.